Os dejo una pequeña lista de recomendaciones para lectores jóvenes que están cerca de dar el salto a las lecturas de mayores, si es que para entendernos al menos vale este apellido.

La lista la hemos ido completando amigos de la tertulia literaria de Family Up, y creo que es una interesante lista para lectores entre 15 y 18 años diría yo. Aunque claro, las edades y la lectura son siempre cuestiones muy relativas.

El primero que aconsejamos es “Blanca como la nieve, roja como la sangre”, un best seller de Alessandro D’ Avenia. Y no es que nos importen las ventas aquí, pero en este caso el dato explica de por sí la repercusión que ha tenido merecidamente el libro. El protagonista es un chico de dieciséis años con los gustos típicos de la juventud de hoy, como las pantallitas o el fútbol, por ello, con ese personaje con el que fácilmente puede uno identificarse es más fácil que los jóvenes se enganchen a la lectura del libro, que luego no defrauda.

También del mismo autor italiano, “Cosas que nadie sabe”, una obra interesante también en la que se entrecruzan vidas de adultos y adolescentes.

“El precio a pagar”, es una novela de carácter autobiográfico de Joseph Fadelle que fue un éxito en Francia en 2010, traduciéndose a numerosos idiomas. Una obra que requiere una mayor capacidad lectora, un poco de madurez diría, por lo que yo esperaría más cerca de los 18.

En España podemos citar “Carta del más allá”, de Torcuato Luca de Tena, buen autor al que no se reconoce el mérito literario que merece.

Indudablemente un gran autor al que pueden acceder los jóvenes es Louis de Wohl, autor al que citamos mucho en la web, y que no es para menos, se trata de unos de los mejores y más prolíficos escritores de novela histórica del siglo XX, tratando entre otras cuestiones novelas en torno a la vida de conocidos personajes como La luz apacible (sobre santo Tomás), Atila, El Oriente en llamas (sobre S. Francisco Javier), El último cruzado (D. Juan de Austria) o El mendigo alegre (sobre S. Francisco de Asís), Corazón inquieto (sobre S. Agustín). Amplia variedad de autores y épocas para disfrutar a la vez que reflexionar sobre las cuestiones importantes de la vida.

Un gran libro de fácil lectura es “El Hobbit” de J.R.R. Tolkien, sin la extensión de El Señor de los anillos, de la que tenemos reseña específica, pero que por no ser tan conocido como la gran obra no es menos recomendable.

El salto a la madurez

“La ciudad de la alegría” de Dominique Lapierre, lleva camino de convertirse en un clásico, una importante novela en la que se narran distintas historias sucedidas en un barrio marginal de Calcuta. Bello, conmovedor, duro en ocasiones, pero que abre la puerta a la esperanza, y a una lectura ya de madurez para nuestros jóvenes.

Dos libros también camino de ser clásicos y que queremos recuperar, son “Matar a un ruiseñor” de Harper Lee, y “Momo” de Michael Ende, de este se cita la gran novela “La historia interminable”, pero Momo fue un libro que desde el principio tuvo gran acogida, y que es realmente interesante, y de alguna forma, distinto a lo que uno puede encontrar en los estantes de hoy. Son dos libros que también sirven de bisagra entre la lectura juvenil y la madura.

Y por finalizar quería hacerlo con una obra singular, pero muy recomendable por mi parte, “Cautivado por la alegría” de C.S. Lewis. Es posible que a esta edad los jóvenes ya hayan leído Narnia, maravillosa historia recomendable para adolescentes, o incluso para más jóvenes, ahora, madurando en sus lecturas podían saltar a este estupendo ensayo de carácter autobiográfico en el que Lewis mira su pasado desde el punto de vista de la búsqueda de la felicidad, y que podría constituir su entrada definitiva en la madurez lectora.

Pero sobre todo, lo que queremos de nuestros jóvenes es que disfruten con los libros, y que lean cuanto más mejor.