Se cumplen esta semana 340 años del nacimiento de Johann Sebastian Bach, según un cierto consenso, el más importante músico de la historia. Y queremos aprovechar la ocasión para alegrarnos un rato con alguna pieza suya.
Creyente ferviente como era, y dadas las fechas que andamos, quizá lo más oportuno sería recomendar alguna obra de las relacionadas con la pasión, dos grandes oratorios según la Pasión de Jesús, por ejemplo, dos obras majestuosas.
Pero la extensión y dificultad se nos va de la humilde pretensión que tenemos aquí. Así, que hemos elegido una cantata, accesible, igualmente bella, quizá más popular y sencilla, pero sin que ello desmerezca su calidad. Bueno en realidad una parte de una cantata, una joya escrita para coro de cuatro voces y orquesta.
La Fe que transmite es una forma deliciosa de acercarnos igualmente a Jesús en este tiempo cercano a la Pascua, tan importante para los creyentes, y que nos recuerda que Jesús, es precisamente aquello que da título a esta cantata, ni más ni menos, que la alegría de los hombres. Lo único que verdaderamente puede dar un sentido pleno y alegre a nuestras vidas.
Os dejamos el texto cantado en alemán; Jesus bleibet meine Freude,meines Herzens Trost und Saft,Jesus wehret allem Leide,er ist meines Lebens Kraft, meiner Augen Lust und Sonne, meiner Seele Schatz und Wonne; darum lass’ ich Jesum nichtaus dem Herzen und Gesicht.
Y su traducción al español: Jesús sigue siendo mi alegría, consuelo y bálsamo de mi corazón. .Jesús me defiende de toda pena. Él es la fuerza de mi vida, el gozo y el sol de mis ojos, el tesoro y la delicia de mi alma; por eso no quiero dejar ir a Jesús fuera de mi corazón y de mi vista.




